lunes, 13 de octubre de 2008

¿Eres virus o simbionte?

El otro día, estaba escuchando en la radio a un colaborador de radio Granada, creo que un tal Germán si no recuerdo mal, que colabora con una sección sobre el automóvil de la ser de Granada y le escuche un par de comentarios, que casi se me caen los palos del sombrajo. Este hombre ha debido criticar en el pasado bastante al director general de tráfico Pere Navarro, pero este día, estaba comentando que bueno la verdad es que se había reducido bastante la siniestralidad en la carretera, pero que le parecían una exageración los limites de velocidad de las carreteras españolas y se comento también que para bajar un poco las emisiones de CO2 no era necesario ir tan despacio con el coche, pero el broche de oro lo puso al final, cuando comento que su hijo (otro premio novel) respondió a un ecologista, al que dejo sin argumentos según él, que no hay que preocuparse por el cambio climático, ya que la tierra se ha recuperado de otros muchos desastres, como con la extinción de los dinosaurios.
Lo cierto es que la respuesta que yo hubiese dado, está en la propia aseveración, la cual comparto por completo, pues creo que la tierra, de no ser por una guerra nuclear completa, se recuperará de lo que le estamos haciendo, la diferencia con lo que paso con los dinosaurios, está en que la enfermedad que el virus "raza humana" está provocando a la tierra y cuyos principales síntomas actualmente son la fiebre en forma de efecto invernadero, la acumulación de residuos tóxicos, o la descamación en la piel en forma de agujero en la capa de ozono, no pretendemos que sea curada mediante la extinción de ese virus, sino que mediante una mutación, ese virus se convierta en un ser simbiótico y no parasitario con la tierra, para ello, el primer paso es romper con ese tipo de mentalidad que se exime de toda responsabilidad, bien por simple pasotismo o por la creencia de que las acciones individuales se diluyen dentro de la marea colectiva; tema este sobre el que volveré seguramente de forma recurrente en este blog, pues si no creyese firmemente en la fuerza de las acciones individuales como motor de cambio, no habría empezado esto.

La conclusión es sencilla: o eres parte del problema y sigues a lo tuyo sin tomar conciencia del problema, o eres parte de la solución y decides tomar parte en un proceso activo de pequeñas o grandes acciones dentro de las posibilidades de cada uno; y en esto creo que no hay medias tintas:
¡ERES VIRUS O SIMBIONTE!

1 comentario:

Anónimo dijo...

La persona que hizo el comentario de los dinosaurios, como no podia ser de otra forma, demostro ser un autentico descerebrado, ya que los Dinosaurios se extinguieron, fue la respuesta de la tierra a esa infeccion.
La gente de derechas a veces me parecen enfermos de codicia y necedad, ya que prefieren la muerte, antes de renunciar a sus delirios de enriqucerse a toda costa.